INICIO / TRATAMIENTOS / Endodoncia
La endodoncia es el procedimiento que se conoce coloquialmente como “matar el nervio”. Consiste en eliminar en el caso de infección y de ser necesario, la parte más profunda del diente. A través de él, limpiamos todo el tejido interior de la pieza y lo rellenamos para mantener el diente sano y útil, pudiendo masticar y evitando la pérdida total de la pieza dental. El conducto reticular o raíz queda limpio y libre de bacterias.
La infección e inflamación de los nervios principalmente se suele dar por la aparición de caries pero también puede aparecer tras un traumatismo, fractura, abrasión o desgaste. Salvar tu diente es nuestra prioridad. A través de este tipo de tratamientos eliminamos las infecciones, saneamos la pieza y la conservamos en tu boca alargando su vida.
.En odontología, existen distintos tipos de endodoncia según el número de conductos que posea el paciente:
Se realiza en los dientes que cuentan con un solo conducto. Las piezas más habituales son los incisivos y caninos.
Se da cuando la pieza dental cuenta con dos conductos.
Se lleva a cabo en dientes con tres o más conductos.
Cuando las caries o las lesiones por traumatismo no se tratan a tiempo, pueden llegar a afectar a la pulpa dental, necesitando una endodoncia.
Es de vital importancia mantener los dientes temporales ya que permiten la correcta masticación de los alimentos, crecimiento de los huesos maxilares, el desarrollo correcto fonético y conservan el espacio que posteriormente ocupará el diente definitivo al erupcionar.
Existen distintos tipos de tratamiento, según el grado de afectación pulpar:
La pulpotomía es una intervención infantil, ya que se realiza únicamente en los dientes de leche cuando la caries se extiende más allá de la superficie pero se trata antes de que alcance la raíz periapical. También se realiza cuando la cámara pulpar se daña por un golpe. El odontólogo elimina la dentina blanca para limpiar la cavidad de la corona con el objetivo de conseguir un buen sellado.
Este tratamiento se realiza con anestesia local y dura aproximadamente unos 20 o 30 minutos. El paciente podrá volver a comer cuando se le haya pasado el efecto de la anestesia.
La manera más eficaz para evitar una endodoncia es realizar un correcto cepillado, es muy importante crear en nuestros hijos un correcto hábito de higiene bucodental a diario.
Hasta que los niños sean autónomos y capaces de cepillarse ellos mismos, los padres deben limpiar sus encías y dientes después de cada comida.
Se aconseja acudir cada 6 meses a la clínica dental para someterse a una revisión, además de realizar aplicaciones de flúor que ayudan a prevenir caries.
Debemos eliminar malos hábitos de los niños pequeños como dormir con chupete o chupándose el dedo. Además de seguir una alimentación equilibrada rica en verduras, frutas y lácteos, evitando el consumo de azúcar.
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